jueves, 13 de marzo de 2008

¿Quieres aprender a BAILAR el TANGO?



El jueves concluye el Lady´s Tango Week. Allí me encontré con argentinos y extranjeros de todas las nacionalidades unidos por el amor al tango.
El tango genera un amor a primera vista, si participas de una clase magistral bajo el compás de Juan Carlos Copes, tus pies y tu corazón querrán vibrar al unísono de esta música pasional y melancólica. Sobre pisos de madera, en un salón estilo francés con paredes de mármol y brocato, me maravillé por la disciplina, el amor y la admiración de tantos bailarines amateurs que buscan aprender a bailar.



El tango es una danza romántica, atrevida, en la que el miedo al contaco debe desaparecer. La mirada fija en mi compañero , sin titubeos, hará que tus pasos sigan magnéticamente el abrazo del varón que guía, proteje las espaldas, sostiene sin privarte de libertad pero seguro de dónde quiere ir.Ver bailar y enseñar al gran maestro Juan Carlos Copes de la mano de su hija Johana, es reencontrar una mirada autóctona y fiel a los orígenes del tango.



Como argentina me sentí gratamente asombrada sabiendo que muchos extranjeros viajan a nuestro país para bailar tango. Muchos enamorados se compran un departamento para tener dónde parar mientras se dedican con entusiamo a tomar clases y bailar en las Milongas más concurridas de Buenos Aires. Hablando con muchos de ellos me enteré por ejemplo, que la dulce Raffaella de Roma vino a bailar junto a su profesora de tango italiana que se perfecciona en Argentina para enseñar en Italia.





Daniela de Napoli, se apasiona sobre sus tacos de charol y modela sus caderas con ritmo desenfadado.



Rossella de Roma se emociona cuando Copes le enseña la distancia óptima entre los partenairs, "usted es una leyenda, estoy tan conmovida, que no sé si me voy a desmayar". Con un look de niña fatal, con blusa fucsia y tacones al tono , Rossella ensaya con su compañero las ensañanzas del maestro.





Todo es magia en este salón del centro Cultural Buen Ayre, los hombres, de negro impecable, con gomina al estilo Gardel, evocan a un hombre varonil y elegante, las mujeres se contornean en sus stilettos tangueros con gracia y desenfado.
Dan ganas de bailar y dejarnos llevar por un compañero seguro y pasional,... no te parece?.


Adriana Paoletta

1 comentario:

Unknown dijo...

Adriana, gracias por el comentario. Me gusto tu nota de hecho te vote.

sdos,
Fabricio